Alinear la vida con los propósitos del alma
Discernir entre los deseos de la mente y los anhelos del alma, es una de las cosas más difíciles de hacer para los seres humanos, cuando estamos aquí, con un cuerpo físico en la Tierra.
Normalmente ahí tenemos una gran dualidad, una lucha interna. Porque como humanos tenemos unas necesidades afectivas, pareja, hijos, necesitamos un lugar donde vivir, un trabajo que nos permita pagar nuestros gastos y demás necesidades que nos suelen absorber por completo.
Pero el alma viene con unos propósitos que no siempre coinciden con los deseos de la mente, producidos sobre todo por el entorno social.
Por eso, a través de la Terapia Regresiva podemos recuperar nuestro diseño de vida, nuestros propósitos, aquellas cosas que vinimos a resolver. Puede que necesitemos resolver alguna relación, emociones que nos dañan, actitudes inadecuadas y sobre todo aprender a perdonar, a perder el orgullo, a resolver aquellas cosas que no nos hacen sentir bien con nosotros mismos. Sanar todo ello nos ayuda a alinearnos con los propósitos del alma y a experimentar un tipo de paz interna, que no nos proporciona ninguno de los deseos externos que consigamos cumplir.
Es maravilloso cumplir nuestros sueños y deseos, pero sin desatender los anhelos más profundos que vienen del alma.
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